Y de pronto sin darte cuenta, tu niña crece tanto, se convierte en una hermosa mujercita llena de sueños e ilusiones, viviendo intensamente cada bello momento de su vida.
En el 7o aniversario de novios, Adrián se encargó de organizar una hermosa velada para el festejo, sin que Samantha siquiera imaginara que mientras tomaban una bella sesión de fotos, repentinamente Adrián se posara en una rodilla para hacerle la gran pregunta ¿Quieres casarte conmigo?
Samuel y yo llegábamos del cine, Samantha y Adrián esperaban afuera en el carro. Entramos a la casa y subimos a nuestra habitación. Samantha me dijo que le dijera a Samuel si podía bajar... imaginé que Adrián quería preguntarle de algún tema en específico... luego Samantha me dice, "tu también". Cuando bajamos, ellos estaban sentados en el sillón, se levantaron tomados de las manos, y no hubo falta que dijeran nada, en los ojos de los dos destellaba una gran felicidad... en eso nos dieron la noticia. Adrián me propuso matrimonio. Mi corazón se estremeció con la noticia, lejos de pensar lo muy feliz que estaba mi hija, mi corazón de madre de inmediato pensó que pronto se iría de nuestra casa, que por las noches ya no dormiría en su cama a un lado de mi habitación, que al levantarme y pasar por su cuarto ya no la vería ahí, ni desayunaríamos juntas. Fueron tantas las emociones que rompí en un llanto ahogado, la abrazé con fuerza. Para Samuel fue una noticia que no le causaba alegría, también por el hecho de saber que ya no vivirá con nosotros.
Es difícil aceptar que esa es la ley de la vida, y que todo vale la pena por ver a nuestra hijita Samantha feliz. Fijaron fecha de boda para 1 año y medio, los cuales pensamos disfrutar enormemente mientras aún viva junto a nosotros.
Felicidades hijita, mereces toda la felicidad del mundo! 💍